Luanda - La secretaria de Estado de la Familia y Promoción de la Mujer, Alcina Kindanda, pidió este viernes, en Luanda, a las familias que se guíen por el diálogo en la educación de los niños y en la transmisión de las enseñanzas.
El llamamiento fue hecho al margen de una visita a los niños ingresados en el Hospital General Especializado Neves Bendinha, cuyas manos fueron quemadas por su padre en el barrio Boa Esperança, en el municipio de Cacuaco, por haber comido pan sin el consentimiento del progenitor.
La responsable llamó la atención de las familias para que no ejerzan violencia contra los niños.
Defendió que, como futuro de la nación, los niños deben ver salvaguardados sus derechos a la educación, a la salud y a la protección, entre otros.
Con este fin, exhortó a los medios de comunicación a divulgar los instrumentos jurídicos que penalizan los actos de violencia, con énfasis en la Ley 25/11 sobre Violencia Doméstica.
Destacó la necesidad de que las personas denuncien posibles actos de violencia a través de la línea SOS niño (15015), de acceso gratuito.
Afirmó que el gobierno cuenta con una red de protección de niños, en la que participan organizaciones no gubernamentales, iglesias, administraciones municipales y comunales y particulares.
En la ocasión, el director general del Instituto Nacional de la Infancia (INAC), Paulo Kalesi, explicó que tuvieron conocimiento de la situación a través de las redes sociales y movilizaron rápidamente un equipo al lugar, con el apoyo de la policía.
Garantizó que el INAC seguirá trabajando con la familia para averiguar si existen condiciones mínimas de protección, con el fin de garantizar que tan pronto los niños reciban alta del hospital, puedan estar bajo el cuidado de la familia.
Por su parte, la directora clínica del Hospital General Especializado Neves Bendinha, Antonieta Guilherme, dijo que los dos niños, Emiliano José y Adilson José, de 12 y ocho años respectivamente, ingresaron en la unidad el miércoles 19 con quemaduras provocadas.
"Un niño presenta quemadura hipodérmica B, estimada en 3 por ciento de la superficie corporal, que afectó manos y muslo. El otro, por su parte, tiene quemaduras del mismo grado, con un índice del 2 por ciento de la superficie corporal quemada, pero sólo le afectó a la mano derecha", aclaró.
La médica también añadió que este tipo de situaciones son habituales, y que en algunos casos los niños mienten para proteger a los agresores.
Según la fisioterapeuta, Euridice Pinje, el niño tenía ligeras dificultades para mover los dedos, por lo que se le colocó una férula correctora.
Con Emiliana, el trabajo se limitó a la cuestión de la marcha, dadas las dificultades causadas por las quemaduras en los muslos. CPM/OHA/AK/EP