Luanda - La inexistencia de infraestructuras y de servicios esenciales en las áreas rurales condicionan la seguridad alimenticia, el desarrollo sostenible e influencia en la calidad de vida de las poblaciones, indica el inoforme del Registro Agropecuario y Pescas (RAPP).
Según el informe final de la RAPP 2019-2020, el primero pos-independencia, presentado el 17 de enero por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el sector agrícola, ganadero y pesquero enfrenta múltiples condicionantes, desde la producción, pos-cosecha, embase, evacuación, transporte y comercialización.
Estos hechos, aclara el informe comunitario de resultados, resultan de la encuesta realizada a más de 23.000 poblados del país y contribuyen a la baja productividad y bajos ingresos de la agricultura, la pesca y la acuicultura.
Los datos recolectados indican que el 89% de las aldeas no cuentan con sistemas de riego ni abastecimiento de agua, quedando las actividades productivas dependientes de las lluvias.
De las 23.832 veredas encuestadas en el país por la RAPP, en cuanto a los servicios de salud, sólo 3.230 (alrededor del 14%) cuentan con una unidad de salud (hospital, centro o puesto médico).
En cuanto a las fuentes de energía eléctrica, los resultados muestran que el 83,7% de las veredas no cuentan con ninguna fuente de energía eléctrica, el 11% recurre a fuentes alternativas privadas (generador) y solo el tres por ciento de las comunas tiene consumo de la red pública.
En este campo, el 2% se beneficia de generadores comunitarios y el 1% usa paneles solares.
La falta de instituciones bancarias es otra limitación importante que enfrentan las comunidades rurales.
El acceso a la financiación bancaria y/o microcrédito, por aldeas, corresponde al 0,5% a nivel nacional. Los pueblos con mayor acceso al crédito se encuentran en Luanda y Namibe, con 6% y 3%, respectivamente.
Aún en cuanto a los servicios sociales básicos, el acceso a los medios de comunicación y transporte, periódico, televisión, red telefónica e internet, la RAPP encontró que el 73% de los poblados tienen acceso a la señal de radio, el 25% a la televisión, el 50% de cobertura telefónica.
Al respecto, el 12% de las poblados tiene acceso a internet, el dos por ciento accede a diarios y alrededor del 21% no tiene acceso a ningún medio de comunicación.
En cuanto al transporte, de las veredas encuestadas (23 832), 11 mil 781 tienen acceso al servicio de taxi (49%), dos mil 215 tienen acceso al ómnibus, 420 utilizan lanchas, así como 250 veredas tienen acceso al tren (1, 0%).
Por ello, el RAPP 2019-2020 recomienda empoderar las zonas rurales con infraestructura y servicios esenciales, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las poblaciones y brindar seguridad alimentaria para el desarrollo sostenible.
Uno de los principales objetivos del RAPP 2019-2020 es brindar al Gobierno, al sector privado, a las instituciones académicas, a la sociedad civil, a los socios y a todos los usuarios, datos estadísticos confiables, actualizados y suficientemente desagregados.
También implica responder a las necesidades de planificación, seguimiento y evaluación de iniciativas destinadas al desarrollo de los sectores agrícolas, pastoril y pesquero.