Luanda - La ministra de Estado para el Área Social, Carolina Cerqueira, destacó, este martes, la atención del Ejecutivo al bienestar social de los jóvenes, con el aumento de la oferta de formación y atención a la salud.
Al hablar en el relanzamiento de la campaña de educación y concientización de las familias sobre el impacto negativo del matrimonio y embarazo precoz, la ministra destacó el proyecto para empoderar a las niñas y aprender de los programas PAT 2, presupuestado en USD 250 millones, financiado por el Banco Mundial ( BM). Según la ministra, se trata de programas que beneficiarán a los jóvenes, y en particular a las niñas, para evitar el éxodo y la deserción escolar, especialmente en las zonas rurales, permitiendo un mayor acceso a la escuela y nuevas oportunidades para su formación y empleo a través de su futura inclusión en el mundo del trabajo socialmente útil.
Carolina Cerqueira también señaló las acciones que se enmarcan en el ámbito del programa de combate a la pobreza, entre las que destacamos las acciones derivadas del Programa de Alimentación Escolar, cuyo objetivo es atraer a la escuela a los niños más vulnerables y apoyarlos tanto en su alimentación y bienestar, en el proceso de aprendizaje, así como en la promoción de la igualdad de género alentando a las niñas a asistir a la escuela, reduciendo el riesgo de matrimonios y embarazos precoces y la violencia de género. La ministra dijo que es necesario que los angoleños contribuyan para la constitución de una nueva moral en las familias y en la sociedad, basada en la igualdad de derechos y deberes, el respeto a la personalidad de cada persona, la protección del niño y el espíritu de ayuda mutua. “Debemos promover cada vez más una sociedad formada por los más nobles valores humanos y sociales”, animó. Según la dirigente, el matrimonio y el embarazo precoces son prácticas africanas que afectan mayoritariamente a las niñas y constituyen una forma de violencia contra los derechos de los niños. África, dijo, es el continente con más matrimonios infantiles, con 12 millones de casos por año, con prácticas culturales y religiosas, pobreza, violencia sexual y conflictos como principales causas.