Luanda - Un equipo de investigadores de la National Geographic definió, por primera vez, científicamente, el límite de la torre de agua en el altiplano de Angola, dentro de la meseta central de Bié, sobre una elevación de 1.274 metros.
Según una nota de National Geographic, enviada este martes a la Angop, esa definición está expresa en un nuevo artículo académico de este equipo, publicado en la edición de julio de la revista Springer's Environmental Monitoring and Assessment.
Sin embargo, la ausencia de tal definición ha obstaculizado los esfuerzos globales para protegerlo y preservarlo, además de su importancia ecológica e hidrológica, dentro de la ciencia académica.
Refiere que el artículo aparece en el marco del proyecto de vida silvestre Okavango, lo que hace de esta definición un paso importante en la conservación y garantía de seguridad hídrica para millones de personas.
Señala que con este estudio, el equipo desafía la idea de que, debido a la falta de nieve y hielo permanentes, los mapas globales suelen representar a África como si no tuviera torres de agua.
Aclara que Angola es fuente de muchos ríos importantes en el sur de África, que se refieren a él como la “torre de agua” de la región, cuyas tierras altas almacenan grandes cantidades de agua dulce, que corre cientos de kilómetros río abajo, eventualmente alimentando personas, proyectos agrícolas y naturaleza en algunas de las regiones más áridas del sur del continente.
El artículo se refiere a un promedio de 423 kilómetros cúbicos de lluvia caen en el AHWT cada año, lo que equivale a casi 170 millones de piscinas olímpicas.
El AHWT cubre un área de 380.382 kilómetros cuadrados, proporcionando recursos de agua dulce a siete países, incluidos Angola, Zambia, Zimbabue, Mozambique, República Democrática del Congo, Namibia y Botsuana.