Quiçama - El municipio de Quiçama completa hoy, domingo (02), 85 años de existencia con el foco en mejorar las condiciones sociales básicas de la población.
Por Assis Quituta, Periodista de la ANGOP
Esta es la falta parcial de agua, electricidad, caminos secundarios y terciarios, escuelas y hospitales, así como la escasez de personal calificado.
Más rural, el municipio más grande (12.046 km2) y el menos poblado de la provincia de Luanda (45.262 habitantes, censo de 2014), Quiçama también enfrenta problemas de gestión, debido a que alberga un parque nacional y un extenso litoral, que requiere la intervención de otros departamentos ministeriales, como Medio Ambiente, Cultura y Turismo y Pesca.
La dispersión de sus habitantes es otro "dolor de cabeza" para la administración local, ya que dificulta, si no imposibilita, construir infraestructuras sociales y dotar de condiciones básicas a cada uno de los pueblos o localidades, separados entre sí por poco menos de dos o cinco kilómetros, en todas las comunas.
En cuanto al abastecimiento de agua potable, aunque el municipio está bañado por dos ríos (Kwanza y Longa), sólo las principales comunas (Muxima) y Mumbondo cuentan con estaciones compactas de captación y tratamiento de agua, de 80 y 50 metros cúbicos cada una, capaces de abasteciendo a más de 1800 habitantes en ambas localidades.
Las otras tres comunas son abastecidas por camiones cisterna, que se han mostrado incapaces dadas las dificultades de mantenimiento de los vehículos.
La distribución de energía eléctrica se realiza por generadores, de 8 am a 11 pm, únicamente en las sedes comunales de Muxima y Cabo Ledo.
Sin embargo, la falta de inversionistas capaces de dinamizar la economía local y promover más el turismo, ya que el municipio se caracteriza por varias áreas susceptibles de explotación turística, entre ríos, playas pintorescas, un parque nacional con una fauna y flora diversa, puede considerarse la causa del letargo de su desarrollo.
En ese sentido, debido a la subutilización del turismo en el parque nacional, la ministra del Medio Ambiente, Ana Paula de Carvalho, aconsejó recientemente sobre la provisión de condiciones de alimentación y alojamiento para los turistas.
Sin embargo, la infraestructura construida en el parque, como 25 bungalós, un restaurante y quioscos, se están deteriorando debido a la infrautilización.
Según el director de seguridad del parque, António Silva, los diversos inversionistas que parecen interesados en administrar la infraestructura del parque se dan por vencidos después de contactar a las autoridades legales, por razones desconocidas.
El parque cuenta con un total de 99 guardas, considerados insuficientes para asegurar una extensión de 9.960 kilómetros cuadrados, por lo que se necesitarían al menos 250 más.
Durante un informe de la ANGOP en el parque, en un fin de semana, se registró la presencia de más de 50 turistas, entre nacionales y extranjeros, que clamaban por condiciones de alojamiento y alimentación.
Según el guardia forestal de turno, el número de visitantes durante toda la semana ha sido entre 30 y 50, quienes deben pagar Kz 1500 cada uno (niños), Kz 2500 (adultos) en la entrada, Kz 4000 para ver animales en safari, o 2.000 si es en coche particular, por un periodo de dos horas.
Manadas de ñus (Connochaetes), bambi (antílope), elefantes, ololongos (antílope), cebras y monos son, entre otros, los animales más vistosos y en mayor cantidad del parque, lamentando las jirafas que son en menor número, sólo dos machos.
Obras del PIIM en curso
Doce obras en ejecución y dos por iniciar, de un total de 20, en la cartera del Plan Integrado de Intervención en los Municipios (PIIM), en Quiçama, están condicionadas por el retraso en la validación del reequilibrio financiero.
En general, la ejecución física de las obras del PIIM, que se adelantan en el municipio, está en 59,93 por ciento y la financiera en 53,54 por ciento, según el director de la oficina municipal de estudios y planeamiento, Edio Chinguvo.
Los mejores tiempos a la vista para el pueblo de Muxima
Doce años después de su transferencia de la provincia de Bengo a Luanda, en 2011, el municipio de Quiçama se beneficiará de una profunda recalificación, especialmente en la aldea de Muxima.
Todavía compuesta por casas de madera y barro, la aldea de Muxima erá completamente reconstruida, incluida la construcción de una iglesia católica basílica.
En efecto, se han terminado 300 viviendas de las 600 (T3) que se construirán en el pueblo de Coxi, a ocho kilómetros de Muxima, en la salida a Cabo Ledo, con el fin de albergar a los vecinos del barrio Catondo y facilitar así la el inicio de las obras de la villa, que pronto podrá convertirse en un espacio de turismo religioso.
El proyecto de recalificación también incluye la construcción de un centro médico, administración local, Comando de la Policía Nacional, escuela, casa de la comunidad, edificio del clero, parcelación para viviendas familiares y un campo de acampada en Muxima, ubicada a 130 kilómetros de la ciudad de Luanda.
A implantarse en un área de 90 hectáreas, de las cuales 40 hectáreas en esta primera fase, la recalificación del pueblo de Muxima incluye la construcción de infraestructuras para áreas de edificación residencial y comercial, central eléctrica y tratamiento de aguas potables y residuales.
El proyecto contará también con cerca de 114 mil metros cuadrados de área vial, con un ancho promedio de 10 metros, y de diez a 12 kilómetros de vías nuevas y renovadas, estacionamiento para tres mil vehículos livianos y cerca de 50 mil metros cuadrados de áreas verdes.
El futuro Santuario de Nuestra Señora de Muxima, también conocido como Basílica de Nuestra Señora de Muxima, que se construirá en un área de 18.000 metros cuadrados, tendrá capacidad para albergar al menos 4.600 personas, una plaza pública con capacidad para 200 mil devotos y otros cinco mil dentro del santuario.
El Presidente de la República, João Lourenço, autorizó, por orden, en 2018, la recalificación de la villa y santuario de Muxima, con un presupuesto total cercano a los 91 mil 620 millones 393 mil y 916 kwanzas (un dólar valía 308,61 kwanzas en esa fecha).
El Santuario de Muxima es el centro de culto más grande para los católicos en Angola, y anualmente alberga una peregrinación con cientos de miles de cristianos de esa congregación.
Ubicada a orillas del río Kwanza, en el municipio luandés de Quiçama, la zona fue ocupada por los portugueses en 1589, quienes, diez años después, construyeron una fortaleza y la Iglesia de Nossa Senhora da Conceição, también conocida como “Mamã Muxima” .
El municipio de Quiçama limita al norte con los municipios de Viana e Icolo y Bengo, al este con los municipios de Cambambe (provincia de Cuanza Norte), Libolo y Quibala, y al sur con los municipios de Quilenda y Porto Amboim (provincia de Cuanza Sur) y al oeste con el Océano Atlántico.
Además de la comuna de Muxima, el municipio de Quiçama comprende las comunas de Demba Chio, Quixinge, Mumbondo y Cabo Ledo.
Gran parte del municipio está ocupado por el Parque Nacional Quiçama.