Luanda – La situación de la mayoría de los niños africanos sigue siendo crítica, debido a factores relacionados con su situación socioeconómica y cultural, así como a los desastres naturales, conflictos armados y hambre.
El hecho fue manifestado, este miércoles, por el embajador de Angola en Etiopía y representante permanente de la Unión Africana, Miguel Bembe, en una entrevista a la ANGOP, para abordar la actual situación del niño africano.
El diplomático dijo que África es el continente donde los niños integran en mayor número los grupos armados y, en consecuencia, se registra el índice más alto de víctimas de violencia sexual.
Según Miguel Bembe, éste y otros aspectos contrastan con las normas internacionales establecidas.
Según el responsable, en los últimos años, el continente ha constatado el aumento y la intensidad de conflictos, en los miles de niños reclutados por fuerzas gubernamentales y por grupos armados.
Añadió que estas acciones causaron miles de casos de paralización de estudios, de retiradas forzosas de la convivencia familiar, de enfrentamiento de la explotación sexual, multiplicación del trabajo infantil y transformación de niños en soldados.
Señaló que los conflictos en África impactan negativamente en el desarrollo de los niños de forma directa e indirecta, sobre todo en el seno familiar, en su crecimiento intelectual y en la vida social y cultural.
En su opinión, los menores en situación de conflicto han sido víctimas de ataques perpetrados por las partes implicadas, generalmente grupos rebeldes y fuerzas gubernamentales.
“Lamentablemente, los conflictos impiden que los niños tengan la oportunidad de vivir y crecer en un ambiente sano, de disfrutar de asistencia médica y medicina, de educación, de justicia, así como beneficiarse de un futuro prometedor”, lamentó.
Posibles salidas
Para hacer frente a este desafío, dijo que el artículo .º 22 de la Carta Africana de los Derechos y el Bienestar del Niño, establece que los Estados Partes deben respetar y garantizar las normas del Derecho Humanitario Internacional aplicable en conflictos armados que afectan a los niños.
De igual manera, deben abstenerse de la contratación de cualquier niño y adoptar todas las medidas necesarias para garantizar que ningún menor se convierta parte directa en las hostilidades.
Miguel Bembe aclaró que el artículo 27 º de la Carta Africana sobre la Violencia Sexual Contra los niños incluye una disposición que obliga a los Estados a prevenir, combatir y proteger a los niños de esta práctica.