Luanda - Angola y Brasil son pueblos hermanos, unidos, a partir de un crimen contra la humanidad, por la historia común que está entrelazada desde hace varios siglos, afirmó el antropólogo brasileño Dagoberto Fonseca, la noche del jueves, en una conferencia vía Zoom.
Al intervenir en la cuarta conferencia del ciclo de octubre del ciclo “Conversas da Academia à Thursday”, sobre el tema “Angola y Brasil: hermanos de ultramar”, Dagoberto Fonseca reafirmó los vínculos que unen a los dos pueblos, a pesar de estar separados de un punto de vista geográfico.
“Los esclavizados trajeron a Brasil la cultura y la tradición de los reinos de Ndongo y Matamba, convirtiéndonos en pueblos unidos por valores civilizatorios”, destacó durante la conferencia.
Destacó que estos rasgos son particularmente notorios en las lenguas kimbundu y kikongo, en el primero para el idioma y en el segundo, especialmente para la música.
“Además de las similitudes en la forma de pensar, hablar y sonreír y la proximidad en la cocina, el baile y la música, también hay procesos políticos similares entre nosotros”, argumentó.
Dagoberto Fonseca habló de la importancia del abolicionista André Rebouças, como símbolo de resistencia e innovación, no sólo en Brasil, sino también en contextos africanos como Angola, como un legado que permanece tanto en la ingeniería como en la lucha por la igualdad y la justicia social.
También destacó la importancia de los quilombos en la lucha por la libertad.
Se refirió extensamente a la “brasilenidad con contenidos de angoleña”, que se relaciona con la conexión histórica con Angola, que hasta hoy sigue influyendo en la identidad brasileña y viceversa.
“Hay un diálogo intercultural, que valora los aportes de ambas partes”, puntualizó.
Dagoberto Fonseca finalizó su conferencia destacando la necesidad de incrementar la cooperación entre Angola y Brasil, desde el punto de vista académico, político y económico.
Con esta participación, el antropólogo marca su ingreso como miembro correspondiente de la Academia Angoleña de Letras.
El escritor y profesor de la Universidade Estadual Paulista (en S. Paulo, Brasil) es autor, entre otros libros, de Un pueblo, dos naciones. Angola y Brasil, el mundo bantú en el Atlántico (2024) y “¿Conoces ese?” El chiste, la risa y el racismo brasileño (2012).
En el próximo Conversatorio de la Academia, el jueves, previsto para el 7 de noviembre, la economista brasileña Sónia Jorge también marcará su ingreso como Miembro Correspondiente de la Academia angoleña, con la conferencia titulada “Mujeres de Congadeiras y educación antirracista”.
IA/KS