Luanda - El secretario general del Sindicato de Periodistas de Angola, Teixeira Cândido, espera que Angola cuente con una legislación más favorable a la libertad de prensa.
En entrevista con ANGOP, el 3 de Mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, el dirigente sindical afirmó que Angola sigue teniendo una legislación "no favorable" a esta libertad.
Teixeira Cândido destacó, por cierto, que, si bien existen instrumentos funcionales para la autorregulación de la actividad periodística en el país, este hecho aún preocupa a la clase.
"Está claro que todavía no estamos satisfechos, pues seguimos teniendo una legislación poco favorable a la libertad de prensa", comentó, refiriéndose al tema de la autorregulación en el sector.
Desde su punto de vista, es importante que las autoridades angoleñas despenalicen la actividad periodística, en aras de la democracia y la libertad de prensa.
Cabe recordar que el nuevo Código Penal vigente en Angola castiga los delitos cometidos en el ejercicio de la actividad periodística, como lesiones, difamación y calumnias.
Desde otro ángulo, el sindicalista destaca que la existencia de herramientas funcionales para la autorregulación de la actividad periodística en Angola es un sello distintivo de SJA).
Para Teixeira Cândido, si Angola tiene una legislación de prensa más o menos aceptable, es el resultado de la lucha sindical.
“Si hoy tenemos autorregulación funcional, esta es una marca registrada del sindicato, que siempre ha defendido que la clase debe tener su Código y una Comisión de Cartera y Ética”, enfatizó.
En esta pugna, el secretario general de SJA recordó el esfuerzo realizado, liderado por el sindicato, en la gestión del periodista Ismael Mateus, entre 2004 y 2006, que culminó con la aprobación, por parte de la clase, de un Código de Ética.
Teixeira Cândido señala que si en ese momento los temas relacionados con la mejora de las condiciones de clase eran una lucha “casi aislada” del sindicato, hoy en día ya cuenta con el apoyo de otras asociaciones.
Entre estas asociaciones, citó el Instituto de Comunicación de África Austral (MISA) de Angola y el Foro de Mujeres Periodistas por la Igualdad de Género (FMJIG).
En relación a los Consejos de Redacción, dijo que el proyecto, iniciado en TV Zimbo, lamentablemente está detenido porque los periodistas aún no comprenden los instrumentos de garantía que tiene la profesión, ni la esencia del periodismo.
“Primero debemos formar, para que los compañeros comprendan la esencia de nuestra actividad profesional, qué garantías nos ofrece la profesión y cuáles son los medios para defendernos”, recalcó.
El Comité Editorial, aclaró, es un organismo que defiende la ética profesional e interactúa con los líderes editoriales sobre los conflictos editoriales.
Hay muchos conflictos editoriales en las redacciones que necesitan mediadores. Situaciones en las que un editor, por motivos subjetivos, impide la edición de una determinada noticia, deben ser convocadas aquí al Comité Editorial para resolver el conflicto, explicó.
De acuerdo con la ley, las deliberaciones del Comité Editorial se remiten al Comité de Portafolio y Ética y al Ente Regulador de la Comunicación Social (ERCA).
Los mecanismos o instrumentos de autorregulación fluyen voluntariamente desde el interior de los organismos, sus empresas o profesionales, preservando el sector de las intervenciones externas y sus tentaciones de imponer límites a la libertad.
Los instrumentos de autorregulación aseguran, al mismo tiempo, la existencia de mecanismos para asegurar el uso responsable de los medios de comunicación y la correspondiente rendición de cuentas, requeridos para cualquier servicio de impacto público y relevancia social.