Luanda - La II Reunión Ministerial sobre la situación de seguridad y paz en el Este de la República Democrática del Congo (RDC), realizada este martes, en Luanda, acordó un alto el fuego a partir de la medianoche del 4 de agosto.
El encuentro, presidido por el Ministro de Asuntos Exteriores de Angola, Téte António, reunió en la misma mesa a los ministros de Estado, de Asuntos Exteriores, de Cooperación Internacional y de Francofonía de la República Democrática del Congo, Thérèse Kayikwamba Wagner, y de Asuntos Exteriores y de Cooperación Internacional de de Ruanda, Olivier Jean Patrick Nduhungirehe.
Según el comunicado final de la reunión, el alto el fuego será supervisado por el Mecanismo de Verificación Ad Hoc reforzado.
Antes del inicio de las conversaciones, las delegaciones estuvieron en el Palacio Presidencial donde fueron recibidas por el Presidente de la República, João Lourenço, Campeón Africano de la Paz y la Reconciliación y mediador encargado por la Unión Africana para el proceso de paz en la República Democrática del Congo.
La reunión de este martes sigue a la Sesión Ministerial celebrada el 21 de marzo de 2024, cuando las delegaciones de estos tres países concluyeron que es imperativo lograr una paz sostenible en el este de la República Democrática del Congo, con el fin de mejorar el desarrollo económico y el bienestar social de las comunidades en estos dos países vecinos y la subregión de los Grandes Lagos.
Estas iniciativas tienen como objetivo fomentar el diálogo al más alto nivel y restablecer un entorno de confianza entre ambas partes, para evitar que la actual crisis política se convierta en un conflicto regional.
El conflicto en el este de la República Democrática del Congo, que persiste desde 2022, está liderado por fuerzas del movimiento rebelde M23, que, según se informa, cuentan con el apoyo de las fuerzas del gobierno de Ruanda.
Los ataques, que se reanudaron en diciembre de 2023, tienen como objetivo poblaciones civiles, además de violar los derechos humanos, incluida la ocupación de varias zonas en territorio congoleño, lo que constituye una clara violación de los Procesos de Luanda y Nairobi, perjudicando así los esfuerzos diplomáticos y las iniciativas de paz. y la estabilidad en ese país. ART/EP