Luanda - La zona marítima de la región del Golfo de Guinea pierde cerca de mil millones de dólares norteamericanos anualmente por la piratería, la pesca ilegal, los robos en el mar y las drogas, según el decano del Centro de Estudios Estratégicos en África (CEEA), Assis Malaquias.
El experto hablaba al margen de un taller sobre la aplicación del Código de Conducta de Yaundé (CCY), subrayando que se trata sólo de una cuantificación monetaria.
Añadió que, con relación a los peces, la pérdida es aún mayor debido a los efectos multiplicadores que afectan negativamente a las poblaciones.
Por esta razón, dijo que se debe prestar mayor atención a la lucha contra la pesca ilegal debido a los trastornos que causa.
Según Assis Malaquias, frente a los retos de la piratería, los robos en el mar o las drogas, lo más importante es encontrar estructuras y formas de colaboración entre países para frenar estas prácticas negativas.
En este contexto, señaló las zonas que abarcan países como Nigeria y Camerún como las más preocupantes en la región del Golfo de Guinea.
Assis Malaquias destacó el papel de Angola en esta región, no sólo en el ámbito de la seguridad marítima, sino también por el hecho de ser signataria del Código de Conducta de Yaundé y, por tanto, con responsabilidades en el ámbito de su operatividad.
Consideró que la reciente visita a Angola del Presidente de los EE.UU., Joe Biden, es una "señal extremadamente importante" del compromiso de las autoridades angoleñas de trabajar conjuntamente para hacer frente a estos desafíos.
El Código de Conducta de Yaundé es uno de los varios protocolos de seguridad marítima surgidos en África en las dos primeras décadas del siglo XXI, en un contexto de mayor atención de los Estados africanos y los socios internacionales al ámbito marítimo. MGM/SC/AK/EP