Dundo - Para contraponer los elevados índices de inmigración ilegal en la provincia de Lunda-Norte, el Fiscal de la República titular en esa región, João Constantino, pidió que se refuerce la vigilancia fronteriza.
Sólo en los últimos cuatro días, la Policía fronteriza detuvo a 750 ciudadanos de la República Democrática del Congo (RDC), de los cuales 150 eran niños, por entrar ilegalmente en territorio nacional.
La ANGOP tuvo acceso a un documento del Comando Provincial de la Policía Nacional, donde consta esta información y que demuestra que los inmigrantes se instalaron en las zonas de extracción de diamantes.
Los inmigrantes entraron ilegalmente en el país utilizando caminos clandistinos, que están fuera del alcance de los agentes de defensa y seguridad apostados en los puestos fronterizos de Cuango, Caungula, Louvâ, Chitato y Cambulo.
Tras los actos administrativos, fueron repatriados a su país de origen.
Preocupado, el Fiscal de la República en funciones de Lunda-Norte, João Constantino, se reunió el miércoles último con la dirección del Servicio de Emigración y Extranjeros (SME) para conocer la situación real de la migración en la provincia y encontrar mecanismos para impulsar la lucha contra la inmigración ilegal.
El magistrado estuvo también en la frontera de Chissanda, a 10 kilómetros de la ciudad de Dundo, capital de la provincia de Lunda-Norte.
Al final de su jornada de trabajo, João Constantino hizo un llamamiento para que se cree una cultura de la denuncia por parte de la población, ya que se trata de un fenómeno complejo de combatir, dada la amplitud de la frontera con la RDC.
Solicitó a la dirección del SME que remita con regularidad los casos relacionados con la ayuda a la inmigración ilegal, para que los autores respondan de sus actos.
La provincia de Lunda-Norte y la RDC comparten una frontera (terrestre y fluvial) de unos 770 kilómetros. HD/AK/EP