Luanda - El Parlamento angoleño aprobó, este lunes, por unanimidad, el Proyecto de Ley del Estatuto de los Ex Presidentes (PR) y Vicepresidentes de la República.
El diploma, de iniciativa Legislativa del Titular del Poder Ejecutivo, fue aprobado con 188 votos a favor, ningún voto en contra y ninguna abstención, en la VIII Reunión Plenaria Ordinaria de la I Sesión Legislativa de la V Legislatura de la Asamblea Nacional.
El documento que regula los derechos y deberes es aplicable a los ex Presidentes y Vicepresidentes de la República, con exclusión de los que hayan sido destituidos de sus cargos, así como de los que hayan abandonado su función.
El Proyecto de Ley determina que tienen derecho a un subsidio mensual vitalicio correspondiente al salario base del Presidente y Vicepresidente de la República en ejercicio y acumulable a la pensión de jubilación a que tengan derecho, médico personal, seguro de salud, extendido a el cónyuge y los hijos menores, los hijos incapaces o los ascendientes y la vivienda familiar asignada por el Estado y el personal de apoyo.
También tienen derecho a vehículos de protocolo y apoyo proporcionados y asistidos por el Estado, oficiales a las órdenes, seguridad garantizada por órganos del Estado, oficina de trabajo y personal de apoyo a la oficina y viaje anual de vacaciones con pasaje aéreo en 1ª clase, dietas de gastos para sí mismos, cónyuge y los hijos menores o incapaces dentro o fuera del país.
Artículos Los Presidentes y Vicepresidentes de la República pierden los derechos previstos en el diploma de que se trate si son condenados por sentencia firme por delitos de traición a la patria y espionaje, delitos de cohecho, peculado y corrupción y otros que perjudiquen gravemente al Estado Democrático y Ley.
También pierden los derechos previstos en esta Ley si adquieren cualquier nacionalidad extranjera.
El documento establece el secreto y la confidencialidad como deberes principales de todos los asuntos de los que los Ex Presidentes y Vicepresidentes hayan tenido conocimiento durante su ejercicio del cargo, además de los deberes previstos en el régimen de secreto de Estado.
Los ex Presidentes y Vicepresidentes tienen prohibido ejercer cualquier actividad en el sector privado por un período de cinco años, y este impedimento no alcanza a la docencia, la investigación científica o la prestación de servicios en entidades sin fines de lucro.
Los ex Presidentes y Vicepresidentes dejan cargos de incuestionable liderazgo nacional y legitimidad popular, en los que estaban al frente de todo el aparato administrativo del Estado, incluido el militar.
Cuando cesan, tienen consigo una gran red de información y conocimiento que los convierte en elementos fundamentales del Estado.
Declaraciones de votación
El diputado Álvaro Daniel, de UNITA, justificó que su partido votó a favor del diploma porque lo considera fundamental “para la dignificación de quienes, durante algún tiempo de su carrera política, se dedicaron en cuerpo y alma a la conducción de nuestros sagrados destinos”.
Lo consideró un instrumento importante en el espíritu de construcción y consolidación del Estado Democrático y el Estado de derecho.
El diputado Gonçalves Muandumba, del MPLA, destacó la importancia de aprobar el diploma porque “ser Presidente de la República es un honor y un deber de representar al pueblo que lo eligió”.
Para él hablar del Presidente de la República es hablar de una institución que merece respeto y consideración durante y después del ejercicio político.
Por su parte, el diputado Francisco Dinis, del PHA, dijo que con la aprobación de esta Ley la democracia se beneficia “porque hay un reconocimiento explícito de la importancia de la alternancia en el poder y la transición tranquila y, por otro lado, la posibilidad de se previenen los conflictos políticos".
El diputado Benedito Daniel, del grupo parlamentario Mixto PRS/FNLA, también saludó la aprobación del diploma por considerar que los Presidentes y Vicepresidentes de la República son asesores naturales e importantes del Estado y que no pueden quedar desprotegidos.
Angola estuvo una vez dirigida por Agostinho Neto y José Eduardo dos Santos. Actualmente, la jefatura del Estado angoleño es asumida por el Presidente de la República, João Lourenço.