Luanda – La necesidad de aprovechar mejor el potencial del país para el éxito del proceso de diversificación de la economía nacional fue defendida este domingo, en Luanda, por el ministro de Transportes, Ricardo de Abreu.
Al hablar en una reunión con los jefes de las Misiones Diplomáticas y Consulares de Angola, Ricardo de Abreu destacó que fue desde esta perspectiva que se inició la ejecución del proyecto del Corredor de Lobito, cuyo carácter transnacional reúne importantes activos y un gran impacto en la economía regional.
Como parte del cumplimiento de las tareas para su implementación, se anunció que está en marcha el proceso de institucionalización de la Agencia de Facilitación del Transporte de Carga del Corredor de Lobito.
Asimismo, dijo que la elaboración del Plan Maestro, que cuenta con el apoyo del Banco Mundial, y la creación de la Sociedad de Desarrollo del Corredor Lobito, que incluye entidades públicas y privadas, incluido el sector financiero.
Sobre este último, el ministro Ricardo de Abreu dijo que cree que será el gran impulsor de su desarrollo.
El ministro de Relaciones Exteriores, Téte António, destacó que este año tendrá un carácter singular, con una agenda diplomática que exigirá total compromiso de los diplomáticos angoleños.
Agregó que, en un momento en que ya se realizan las celebraciones del 50º aniversario de la independencia nacional, las Misiones Diplomáticas y Consulares deben realizar una amplia movilización de la comunidad angoleña residente.
Durante su intervención, también destacó, entre los trabajos realizados en 2024, entre los hitos en materia de diplomacia económica, la materialización del Proceso de Concesión del Corredor Lobito, factor que sirvió de catalizador para la histórica visita del Presidente de Estados Unidos de América (EE.UU.), Joe Biden, que constituyó un hito histórico indeleble en la diplomacia angoleña.
Corredor de Lobito
El corredor ferroviario de Lobito conecta las regiones del sur de la República Democrática del Congo (RDC) y el noroeste de Zambia con los mercados comerciales regionales y mundiales a través del puerto de Lobito en Angola.
Tiene una línea ferroviaria que se extiende por 1.344 km, desde Lobito (Benguela) hasta Luau (Moxico).
Con el objetivo de rehabilitar y valorizar su potencial, la operación del Corredor Lobito fue adjudicada al consorcio Ferrocarril Atlántico Lobito (formado por las empresas Trafigura, Vecturis y Mota-Engil), ganador del concurso internacional para tal efecto en 2022.
El consorcio prevé aumentar la frecuencia diaria a 50 trenes en 30 años y garantizar 1.600 empleos directos.
Será responsable del transporte de grandes cargas, como minerales de la República Democrática del Congo y Zambia, así como del mantenimiento de la infraestructura (talleres, línea ferroviaria).
El Corredor de Lobito, de gestión privada, incluye el Puerto de Lobito, la Terminal Minera, el Aeropuerto de Catumbela y el Ferrocarril de Benguela.
Dado el papel estratégico para el desarrollo económico regional, se invirtieron más de dos mil millones de dólares en la rehabilitación y modernización de la infraestructura y medios de transporte del Corredor Lobito, con miras a dinamizar el transporte de diversas mercancías, beneficiando a los tres países limítrofes.
Debido a su ubicación, el Corredor de Lobito presenta una ruta estratégica alternativa a los mercados de exportación de Zambia y la RDC y ofrece la ruta más corta que une las principales regiones mineras de los dos países sin litoral.
En Angola, el Corredor conecta el 40 por ciento de la población del país, impulsando inversiones a gran escala en la agricultura y el comercio en las provincias de Benguela, Huambo, Bié y Moxico, regiones atravesadas por el Ferrocarril de Benguela (CFB).
Asimismo, también creará oportunidades para el desarrollo de pequeñas empresas adyacentes al transporte ferroviario y una alternativa ferroviaria competitiva al transporte por carretera.
SC/KS