Luanda - El Presidente de la República, João Lourenço, participa, este miércoles, en Brazzaville, República del Congo, en los trabajos de la 20ª sesión ordinaria de la conferencia de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad Económica de los Estados de África Central (CEEAC).
Para participar de la Cumbre, el Jefe de Estado angoleño partió hoy de Luanda, con destino a la ciudad de Brazzaville.
La sede de la cumbre es el Centro Internacional de Conferencias Kintelé, un complejo protocolar ubicado en las afueras de la capital congoleña.
La cumbre tendrá lugar este miércoles, y los trabajos comenzarán alrededor de las 11 horas, hora local (la misma hora de Angola), y consistirá en una ceremonia pública de apertura.
En la apertura del acto destacaron, entre otras, las intervenciones del Representante Especial del Secretario General de la ONU para África Central, François Fall, y el Presidente de la Comisión de la Unión Africana, Faki Moussa Mahamat.
La ceremonia de apertura también incluye intervenciones del presidente de la Comisión CEEAC, el angoleño Gilberto Veríssimo, y del presidente de la República del Congo y presidente interino de CEEAC, Denis Sassou N’guesso.
El trabajo se desarrollará a puerta cerrada, con la participación exclusiva de Jefes de Estado y pequeños equipos de su entorno, para discutir el plan de acción prioritario para este año y una declaración sobre Mujeres, Paz y Seguridad en África.
Se estima que la sesión se prolongará hasta alrededor de las 14 horas, hora en la que deberá leerse el comunicado final.
Hasta entonces, se habrán producido otros momentos relevantes de la agenda de 7 puntos, que incluye el traspaso de poder en la presidencia de ECCAS, entre el presidente Denis Sassou N'guesso (del Congo) y Félix Tshisekedi (de la República Democrática del Congo).
CEEAC es un bloque económico subregional compuesto por once países (Camerún, Gabón, Angola, Chad, Guinea Ecuatorial, Burundi, República Centroafricana, Santo Tomé y Príncipe, Congo, República Democrática del Congo y Ruanda).
Los propósitos de la Comunidad incluyen la implementación de una política común, el fomento de la libre circulación de bienes, servicios y personas, y el avance del desarrollo industrial.
A medio-largo plazo, CEEAC lucha por la mejora de las conexiones terrestres entre los países que forman el grupo, ya que existe la conciencia de que la movilidad es uno de sus eslabones más débiles como bloque económico.
El presidente de su Comisión, el angoleño Gilberto Veríssimo, es citado reiteradamente refiriéndose al excesivo tiempo que se tarda en recorrer unos cientos de kilómetros entre algunos países miembros, situación que no facilita el comercio y claramente retrasa el progreso económico.
A pesar de su vocación eminentemente económica, la CEEAC también ha sido llamada a debatir temas de seguridad y paz, desafío inevitable dado el contexto que rodea a algunos de los países miembros.
Muchos de los Estados que integran el grupo enfrentan insurgencias permanentes o latentes, evidencia de acciones terroristas de inspiración confesional.
En la conferencia presidencial de hoy en Brazzaville, como se señaló en las reuniones preparatorias que involucraron a expertos en seguridad, los temas vinculados a esta realidad “accesoria” – las amenazas a la paz y la estabilidad – no pueden, de ninguna manera, quedar fuera.
