Brazzaville - El Jefe de Estado angoleño, João Lourenço, se reunió este sábado por la noche en Brazzaville con su homólogo de la República del Congo, Denis Sassou Nguesso, para abordar cuestiones de interés bilateral y la situación de seguridad regional.
El estadista angoleño llegó a la capital congoleña a última hora de la tarde del sábado, por invitación del presidente Denis Sassou Nguesso, para una visita de trabajo de 48 horas.
El encuentro entre ambos mandatarios sirvió para repasar las relaciones históricas entre las dos naciones centroafricanas y la situación política en el continente africano en general, con énfasis en la región de los Grandes Lagos, y en el mundo.
Después de la reunión, João Lourenço y la delegación que lo acompaña asistieron a una cena oficial ofrecida por el Presidente Sassou Nguesso en el Palacio Presidencial en Brazzaville.
El Jefe de Estado angoleño llegó a la capital congoleña procedente de Kampala, Uganda, donde presidió, ese mismo día, los trabajos de la Cumbre Extraordinaria de la Unión Africana (UA) dedicada al desarrollo de la agricultura.
En su discurso de clausura, João Lourenço indicó que hubo una gran unanimidad en cuanto a las decisiones tomadas en la conferencia de Kampala, que serán cruciales para la implementación de los principales objetivos de la reunión, a saber, la construcción de una agricultura robusta, resiliente, inclusiva y sostenible. sistemas alimentarios.
Destacó que el continente africano cuenta con condiciones favorables para el desarrollo de una agricultura productiva que pueda satisfacer las necesidades de sus países y la demanda de alimentos de otras regiones del planeta.
Paz y seguridad
Según João Lourenço, la Cumbre de Kampala abordó exhaustivamente cuestiones relativas a la paz y la seguridad en África, con especial énfasis en aquellas vinculadas al aumento de las acciones terroristas y del extremismo violento y a los cambios inconstitucionales de gobiernos elegidos democráticamente.
Reconoció que los esfuerzos realizados hasta ahora para superar este mal que aqueja esencialmente a una parte del continente “no nos habrán conducido a los resultados deseados, de tener un continente donde la paz y la seguridad, la estabilidad de las instituciones del Estado, sean la garantía de desarrollo económico y social de nuestros países”.
Lamentablemente, continuó, algunas de estas malas prácticas “nos desvían del objetivo central de nuestro continente, que es promover el desarrollo, con la agricultura como motor, un tema que ha merecido toda nuestra atención”.
Aprovechó la oportunidad para expresar su preocupación por la situación de guerra que enfrenta el pueblo de Sudán, sus graves consecuencias para la vida y la seguridad de los ciudadanos, para la economía del país y de los países vecinos, y por el elevado número de refugiados que se encuentran. recepción.
“Una vez más, hacemos un llamamiento a las partes en conflicto para que consideren seriamente la necesidad de resolver el conflicto a través del diálogo”, afirmó.
En cuanto a la situación en el este de la República Democrática del Congo (RDC), indicó que el conflicto entre la RDC y Ruanda podría llegar pronto a su fin, teniendo en cuenta los “grandes avances” logrados en los últimos meses en las reuniones de la Proceso de Luanda, a nivel ministerial.
Una cumbre al más alto nivel contribuirá a desbloquear el impasse, evitar que el proceso retroceda y garantizar que no se desperdicien los entendimientos y los logros ya alcanzados, en particular en lo que respecta a la neutralización de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y la retirada del contingente militar ruandés del territorio de la República Democrática del Congo, predijo.
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