Nueva York - El Presidente de la República (PR), João Lourenço, defendió este jueves, en Nueva York, la necesidad del reconocimiento de la vacuna covid-19 como un bien universal, así como su acceso abierto para permitir una mayor producción y distribución equitativa a la escala mundial.
En su intervención en el debate de la 76a Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), el Jefe de Estado angoleño se refirió a la urgencia de establecer, en términos prácticos, el entendimiento general de que la solidaridad y la simplificación de los procesos en el acceso a las vacunas son los única forma capaz de llevar al mundo a la victoria en la lucha contra la pandemia del Covid-19, ya que permite, de la forma más amplia posible, inmunizar a los habitantes de nuestro planeta.
También dijo que es “impactante ver la disparidad entre unas naciones y otras en cuanto a la disponibilidad de vacunas, ya que estas diferencias permiten, en algunos casos, la administración de terceras dosis, mientras que en África, la gran mayoría de las poblaciones ella no está vacunada, si quiere, con la primera dosis”.
En este contexto, defendió la necesidad de discusión y aprobación, por parte de Naciones Unidas, de decisiones a favor de la liberalización de las patentes de producción de vacunas, para que sea posible vacunarlas en un número creciente de países, haciéndolas más accesibles a todo.
También se refirió a que “todos los efectos y consecuencias del Covid-19 que se registran en otros lugares también tuvieron un fuerte impacto económico y social en la República de Angola”.
Sin embargo, agrega, "pudimos actuar de manera oportuna, con rigor y gran determinación, para contener la propagación de la contaminación a una escala que nos permitiera mantener los niveles de contagio dentro de los límites de la capacidad de respuesta de nuestras estructuras de salud".
Aun así, dijo, la valoración del daño que el Covid-19 deriva para nuestra economía nos da resultados preocupantes por lo que ahora buscamos soluciones que ayuden a mitigarlos con el fin de paliar el sufrimiento de las poblaciones.
Sin embargo, dijo el Presidente João Lourenço, "hemos tenido apoyos e iniciativas que merecen todo nuestro reconocimiento por permitirnos algún alivio en términos de nuestras responsabilidades financieras con nuestros acreedores, lo que nos permite tener cierta capacidad para nuestras enormes y múltiples necesidades".
Ante esta situación, en la que se destaca la acentuada degradación de las condiciones de vida de las poblaciones y del tejido económico y social, añadió, “tenemos que hacer una reflexión profunda para que se encuentren soluciones duraderas. Que sirvan de base para la reconstrucción de las economías más afectadas por la crisis sanitaria mundial”.