Luanda - El Embajador Supremo de la Paz, el angoleño João Kanda Bernardo, defiende la necesidad prevaleciente de los jóvenes angoleños continuar siendo incluídos e integrados en las políticas públicas, para realizar transformaciones sociales en sus lugares de cohabitación.
Al hablar, el viernes 15, sobre la Cumbre del G20 en Brasil, el también diputado a la Asamblea Nacional, afirmó que a pesar del esfuerzo, el nivel de educación en Angola hace que muchos jóvenes todavía prefieran actuar como actores pasivos en el proceso de transformación social.
"Entre los diversos sectores que necesitan mejorar las políticas públicas y la inclusión, en nuestro país se destaca la educación", señaló el secretario de la Comisión de Derechos Humanos, Ciudadanía y Medio Ambiente del Parlamento angoleño, citado en un comunicado.
El crecimiento socio-demográfico, a menudo imprevisto, destacó, conduce a la concentración de familias en las principales ciudades y esto hace que el Gobierno pierda su capacidad de respuesta con prontitud, acabando dejando a muchos niños fuera de la educación y más allá.
"En este contexto, muchos jóvenes angoleños encuentran en la política el mejor espacio y la mejor manera de incidir en la creación de políticas públicas que ayuden en la construcción de ciudades más inclusivas y resilientes", destacó al abordar "El Papel Transformador de los Jóvenes en la Construcción de Ciudades Inclusivas y Resilientes”.
Según João Kanda Bernardo, basándose en la definición de juventud de la Comunidad internacional, se puede entender que, después de todo, todavía hay muy pocos jóvenes que marcan una gran diferencia para el bienestar de la mayoría de la población angoleña, cuyo censo indica que es joven.
En la ocasión, parafraseó al Santo Padre Francisco, cuando dijo que "la política es el mejor modo de ejercer la caridad", porque muchos jóvenes angoleños encuentran en la política el mejor espacio y el modo ideal de incidir en la creación de políticas públicas que ayuden construir ciudades más inclusivas y resilientes.
"Es un honor para mí estar en esta Cumbre tan importante, en el marco de la Presidencia brasileña del G20, para abordar el tema antes mencionado, por lo que agradezco su consideración y la invitación que permite a la juventud angoleña actuar por primera vez en un escenario de este tamaño", afirmó.
Por ello, el embajador supremo de la paz saludó al pueblo brasileño que celebró el día 15 la Proclamación de la República Brasileña, acto que estableció la forma de gobierno republicano presidencial en Brasil, poniendo fin a la monarquía constitucional parlamentaria del entonces Imperio.
"Como sabemos, esta misma proclamación ocurrió el 15 de noviembre de 1889, en la ciudad de Río de Janeiro, entonces capital del Imperio de Brasil, y hoy del G20, que nos trajo aquí y nos reúne en este lugar para discutir cuestiones tangenciales a la vida de nuestras ciudades y de nuestro planeta", enfatizó.
Tras abordar el "Papel transformador de los jóvenes en la construcción de ciudades inclusivas y resilientes en el contexto angoleño", dividió su reflexión en tres fases del proceso histórico de Angola: antes de la independencia, que dura hasta 1975; La de la post independencia y la guerra civil, entre 1975 y 2002; y el callar de las armas, de 2002.
"La Angola independiente tiene casi medio siglo, pero sólo durante 22 años consecutivos el país ha vivido un intento de reconciliar a todos sus hijos al amparo de las armas.
Todas estas fases mencionadas anteriormente tienen a los jóvenes angoleños como actores en la transformación de nuestra sociedad”, aclaró. MDS/EP