Addis Abeba (Angop) - Las mujeres son la espina dorsal de los sistemas agroalimenticios de África, contribuyendo “inmensamente” para la producción, transformación, distribución y sustento de las familias, realzó, este viernes, en Addis Abeba, Etiopía, la comisaria cesante de la Unión Africana para agricultura, desarrollo rural, economía azul y ambiente sostenible, Josefa Sacko.
La diplomática angoleña al final de su mandato en la UA, que intervino en la reunión de alto nivel sobre la formación de las mujeres en la agricultura, celebrada al margen de la 38ª Cumbre de la Unión Africana, destacó que las mujeres constituyen aproximadamente el 52 por ciento de la mano de obra agrícola y contribuyen a la producción de alrededor del 40 por ciento de los alimentos del continente.
“Estas estadísticas por sí solas indican la naturaleza indispensable del compromiso de las mujeres para garantizar la seguridad alimenticia y la estabilidad económica en todo el continente”, destacó.
Señaló que a pesar de esto, las mujeres continúan enfrentando barreras sistémicas que les impiden desarrollar todo su potencial en los sistemas agroalimentarios del continente, en particular el acceso limitado a recursos productivos como la tierra, finanzas, tecnología y servicios, en comparación con sus homólogos masculinos.
Dijo que esta persistente “brecha de género” obstaculiza no sólo el empoderamiento de las mujeres, sino también la productividad y el crecimiento general de la agricultura africana.
Josefa Sacko señaló que los estudios demuestran que, cuando las mujeres tienen igual acceso a los recursos productivos, los ingresos agrícolas pueden aumentar entre un 20 y un 30 por ciento, lo que conduce a una mejora de la seguridad alimenticia y la nutrición familiar.
Según la embajadora, es en reconocimiento de este hecho que los Estados miembros tienen el objetivo, en el marco de los compromisos de la Declaración de Malabo, de aumentar hasta el 20 por ciento de aquí a 2025 la proporción de mujeres rurales con poder de decisión en la agricultura.
“Sin embargo, la evaluación más reciente del cuarto informe de revisión bienal del CAADP muestra que, de los 49 Estados miembros que presentaron informes, sólo siete están en camino de cumplir este compromiso”, dijo.
En su opinión, la situación es alarmante y es una responsabilidad colectiva trabajar juntos, abordando estas barreras y creando un entorno propicio para el florecimiento de las mujeres en los sistemas agroalimentarios de África.
Dijo que para revertir la situación, la Comisión de la Unión Africana (AUC), que reconoce que no puede ocurrir ninguna transformación agrícola significativa sin la plena participación y liderazgo de las mujeres, lanzó la campaña para confinar la azada de mano al museo, abogando por la mecanización para aliviar la carga de las mujeres agricultoras.
También se creó la Plataforma para las Mujeres en la Agricultura (PAWA) para brindar un espacio para las voces y la defensa de las mujeres.
También en este sentido, el Día Internacional de la Mujer Rural se celebra anualmente el 15 de octubre, reconociendo las contribuciones de las mujeres a los sistemas agroalimentarios y, más recientemente, se completó el estudio de referencia para desarrollar un marco de políticas para las mujeres en los sistemas agroalimentarios en África, que guiará los esfuerzos para garantizar un sector agrícola más inclusivo y equitativo.
En el marco del nuevo Programa Integral de Desarrollo Agrícola de África, los Estados miembros se comprometieron a empoderar al menos el 30 por ciento de las mujeres en los sistemas agroalimentarios para 2034, facilitando el acceso a recursos productivos, servicios financieros, innovación, tecnología y acceso a la tierra para mujeres, jóvenes y grupos marginados. FMA/ART/EP