Doha - La quinta Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Países Menos Desarrollados (PMD5) comenzó este domingo, en Doha, capital de Qatar, bajo el lema “Del Potencial a la Prosperidad”, con la participación de la Vicepresidenta de Angola, Esperança da Costa.
La vicepresidenta Esperança da Costa será la 24ª en intervenir en el evento, en una lista de 165 intervenciones.
La ceremonia de apertura estuvo presidida por las intervenciones del Emir de Qatar, Sheikh Tamim Bin Hamad Al Thani, el Secretario General (SG) de las Naciones Unidas, António Guterres, Csaba Korosi, Presidente de la Asamblea General, Lachezara Stoeva, Presidenta de la Consejo Económico y Social.
También intervinieron el Jefe de Estado de Malaui, Lazarus Mc Carthy Chakwera, como presidente del Grupo de Países Menos Desarrollados, el Ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Çavusoglu, entre otras personas.
Guterres dijo que la vacante de Omicron que canceló repentinamente la realización de este evento en enero de 2022, demuestra que el mundo está sujeto a cambios constantes e impredecibles, y señaló que, desde entonces, el mundo ha visto el estallido de la guerra en Ucrania, con un impacto devastador en este país, pero también en los países menos desarrollados que ahora sufren precios astronómicos de alimentos y energía.
El SG de la ONU dijo que las tensiones globales se están profundizando y que quizás no haya un tema más importante en torno al cual convertir las palabras del Programa de Acción de Doha en resultados.
“Los países menos desarrollados se pierden en mareas crecientes de crisis e incertidumbre, caos climático y profunda injusticia global, no pueden seguir el ritmo de los cambios tecnológicos vertiginosos y el desempleo crece, especialmente entre los jóvenes”, declaró.
Lamentó el hecho de que “el sistema financiero global profundamente disfuncional ha estado enviando a los PMA las cuotas más altas, las tasas de interés son hasta ocho veces más altas que en los países desarrollados y es probable que las cosas empeoren”.
Como dije, hoy 25 economías en desarrollo gastan el 20 por ciento de sus presupuestos nacionales, no en construir escuelas, no en alimentar a su pueblo, no en oportunidades de desarrollo para mujeres y niñas, sino en pagar la deuda.
Guterres dijo que los PMD necesitan una revolución de apoyo en varias áreas clave.
“Presentamos al G-20 un paquete de estímulo para unir al mundo y lograr entregar a los PMD por lo menos 500 mil millones de dólares al año a los PMD”, subrayó.
Por su parte, el anfitrión de la conferencia, Sheikh Tamim Bin Hamad Al Thani, anunció, en el marco de los compromisos del Estado de Qatar con los PMA, una contribución de 60 millones de dólares, de los cuales 10 millones de dólares apoyarán la implementación del programa de Acción de Doha, y 50 millones para apoyar los resultados esperados.
En cuanto al Jefe de Estado de Malaui, Lazarus Mc Carthy Chakwera, presidente del Grupo de Países Menos Desarrollados, existe una responsabilidad global común para enfrentar los desafíos de seguridad, la crisis energética, la crisis de la deuda y encontrar soluciones a través de un compromiso colectivo.
Los países más ricos y desarrollados tienen la responsabilidad moral de contribuir para que los PMD puedan ganar y superar los desafíos mundiales. “Esto es una responsabilidad y no un favor”, aseveró.
El programa de conferencias continuó a lo largo del día, con la intervención de diversas personalidades, incluidos Jefes de Estado o sus representantes, así como diversas organizaciones internacionales.