Luanda - Angola volvió a expresar, este viernes, en el Palacio de las Naciones Unidas en Ginebra, su preocupación por la situación de los derechos humanos en el Este de la República Democrática del Congo (RDC) debido a la escalada del conflicto, particularmente en las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur, incluida la toma de la ciudad de Goma.
Al intervenir en la 37ª Sesión Especial del Consejo de Derechos Humanos (CDH) sobre la situación de los derechos humanos en el este de la República Democrática del Congo, la Representante Permanente de Angola ante las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales en Ginebra, Margarida Izata, aprovechó la oportunidad para recordar la posición de Angola de condena de las últimas acciones llevadas a cabo por el Grupo M23.
En este sentido, la diplomática advirtió a los miembros del Consejo de Derechos Humanos sobre las consecuencias, a todos los niveles, de la situación que prevalece en la Región de los Grandes Lagos.
Según la diplomática, las acciones militares del M23 constituyen una flagrante e inaceptable violación del alto el fuego vigente desde el 4 de agosto de 2024, además de constituir una grave violación de la integridad territorial de la RDC.
En este sentido, recordó los esfuerzos y avances alcanzados en el ámbito del Proceso de Luanda, que definió la resolución pacífica del conflicto como la única salida a la crisis a través de un Acuerdo de Paz entre las partes en conflicto.
Por otra parte, Margarida Izata reiteró el llamado al respeto escrupuloso de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario, lo que exige “que ambas partes en el conflicto presten especial atención a la protección de las poblaciones civiles, incluidas las personas desplazadas internamente y los campamentos de refugiados, así como a la seguridad del personal militar presente en el este de la RDC”.
También advirtió que los ataques contra las fuerzas de paz, en particular la MONUSCO y la SADC, son inaceptables y que los responsables deben rendir cuentas.
En este sentido, saludó la memoria de todos los militares caídos en combate.
Al final de su discurso, la Embajadora Margarida Izata reiteró el firme compromiso del Presidente de la República, João Lourenço, de seguir desempeñando su papel de Mediador de la Unión Africana entre la RDC y Ruanda.
Acogió con satisfacción todos los esfuerzos diplomáticos actualmente en curso para lograr la seguridad y la paz en el este de la República Democrática del Congo, incluida la cumbre conjunta SADC/EAC que se celebrará el sábado en Dar-Es-Salan, Tanzania, en la que se espera que participen todas las partes pertinentes, así como otras reuniones sobre el tema que también tendrán lugar en un futuro próximo.
Este 37º período extraordinario de sesiones del Consejo de Derechos Humanos (CDH) sobre la situación de los derechos humanos en el este de la República Democrática del Congo adoptó, por consenso, el proyecto de resolución A/HRC/37/L.1 y recomendó que los 47 miembros transmitieran a la secretaría, en el plazo de dos semanas, cualquier queja que pudieran tener, antes de la adopción final de la resolución.
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