Lubango - El ministro del Interior, Eugénio Laborinho, defendió hoy viernes, en Lubango, provincia de Huela, el refuerzo de la seguridad en la frontera con Namibia, para evitar la inmigración ilegal y otros delitos conexos.
Al hablar en la 21ª Reunión Bilateral entre los Ministerios del Interior de Angola y Asuntos Internos, Migración, Protección y Seguridad de la República de Namibia, dijo que esta medida también ayudará a frenar otros delitos, como el contrabando de combustibles, el tráfico de drogas y el de seres humanos, robo de vehículos, matanza de flora y caza furtiva.
Aún en materia de seguridad, Eugénio Laborinho abogó por la mejora del mecanismo de intercambio de información entre los dos países, fundamentalmente relacionado con los presos en establecimientos penitenciarios.
Respecto a una posible reapertura de la frontera común, el ministro angoleño dijo que, con la dinámica de vacunación contra Covid-19 en marcha, los Gobiernos de Angola y Namibia "podrán decidir si reanudar los procedimientos de entrada y salida en el espacio común".
"Celebramos los procesos de vacunación en curso en ambos países, ya que esto ayudará a mitigar los efectos económicos provocados por la reducción de las transacciones comerciales", enfatizó.
El gobernador de Huila, Nuno Mahapi, quien también habló en el evento, consideró que es en encuentros de ese tipo que los dos países construirán caminos que ayuden a no comprometer los logros alcanzados.
Destacó que el desarrollo económico y social y la prosperidad de los dos pueblos son valores inalienables y deben preservarse, ya que Angola y Namibia deben estar unidos en términos de defensa y seguridad pública.
Desde el miércoles, expertos de ambos países y gobernadores de las provincias transfronterizas, más Huila, por parte de Angola, han analizado asuntos de interés común en la frontera de mil 367 kilómetros de longitud.
La cooperación bilateral en el campo de la seguridad y el orden público, incluidos los instrumentos legales sobre el tema, así como los acuerdos de exención de visado en los pasaportes ordinarios y la libre circulación de personas y mercancías en la frontera, estuvieron en el centro de las discusiones.