Lima - La presidenta de Perú, Dina Boluarte, anunció que enviará al Congreso un nuevo proyecto de ley a proponer la anticipación de las elecciones generales a octubre, si el parlamento rechaza este lunes nuevamente la solicitud del Gobierno.
"Depende única y exclusivamente al Congreso la responsabilidad de aprobar la anticipación de las elecciones para este año", subrayó Dina Boluarte, en un mensaje transmitido por la televisión el domingo.
Si el parlamento no llegue a consenso, el ejecutivo "presentará de inmediato dos iniciativas legislativas con carácter de urgencia", una para anticipar las elecciones y otra para proceder a la reforma total de la actual Constitución peruana, dijo la jefa de Estado.
El Congreso de Perú rechazó el viernes, después de más de ocho horas de debate, con 45 votos a favor, 65 en contra y dos abstenciones, la propuesta del gobierno.
El proyecto de ley proponía incorporar disposiciones transitorias especiales para que se realizara elecciones generales en octubre, con una posible segunda vuelta presidencial en diciembre.
Boluarte lamentó que en el parlamento, "en una discusión estéril, no se consiguiera nada concreto", aparte de la aprobación de una solicitud de reconsideración, que será discutida, a partir de las 10:00 a.m (04:00 p.m en Luanda) y que implica una nueva votación.
Perú se enfrenta a una "espiral de violencia" debido a las protestas antigubernamentales que causaron la muerte de 65 personas desde diciembre, en las que la "policía está siendo atacada a quemarropa por un grupo organizado que quiere sembrar el caos, el odio entre todos los peruanos", acusó la Presidenta.
"Las autoridades tienen el deber de proteger a todos los peruanos, esta responsabilidad no exenta al Congreso", afirmó la jefa de Estado.
Boluarte añadió que una nueva Constitución, después de aprobada por el parlamento, se someterá el referendo "para que el pueblo decida si la acepta o no".
La convocatoria inmediata de elecciones para una asamblea constituyente y la demisión de Boluarte están entre las principales reivindicaciones de los manifestantes, provenientes de zonas más pobres del país.
Los manifestantes exigen también la disolución del Congreso y la punición para los responsables policiales y militares involucrados en la sangrienta represión de las protestas y la liberación del ex Presidente Pedro Castillo, acusado de promover un "golpe de Estado" constitucional y en prisión preventiva desde el inicio de diciembre.
La crisis política que abala Perú es también reflejo de la enorme brecha entre Lima, la capital, y las provincias pobres que apoyan a Castillo, de origen amerindio.