París - Los seis reactores que el presidente francés, Emmanuel Macron, pretende construir para renovar el parque actual, y que deberán entrar en servicio progresivamente a partir de 2037, costarán 51.700 millones de euros, según el gobierno francés.
En un informe difundido hoy (sábado) por la oficina del primer ministro, Jean Castex, los autores señalan que esa cantidad se invertiría durante 25 años en la construcción de estos seis reactores, que tendrán una vida útil de 60 años después de su puesta en marcha.
Esta evaluación corresponde a un escenario central y no incluye el costo de financiamiento.
Por el contrario, ya incluye 6.900 millones de euros para incertidumbres y 1.700 millones de euros para el desmantelamiento de instalaciones y la gestión a largo plazo de residuos nucleares.
En el peor de los casos, los costos podrían aumentar en 4.600 millones de euros.
El día 10, Macron presentó un programa para construir seis nuevos reactores del tipo EPR2, una versión mejorada del Reactor Presurizado Europeo (EPR) que se construye en Flamanville, en la costa de Normandía, y que acumula años de retraso y costes extra del orden de miles de millones de euros.
El plan de Macron también incluye construir hasta ocho reactores adicionales.
La EPR de Flamanville lleva 14 años en construcción, no se prevé que entre en funcionamiento antes de 2023 y el gasto inicialmente presupuestado de 3.400 millones de euros ya alcanza los 12.700 millones.
De la electricidad producida en Francia, el 70 por ciento proviene de los 56 reactores nucleares operados por EDF, varios de los cuales están programados para finalizar en los próximos años.