Washington - Una niña, de nueve años, sobrevivió después de ser atacada, el último sábado, por un puma, también conocido como onza-parda.
El ataque ocurrió cuando la niña caminaba por un trillo con dos amigos, en un acampamento cerca de Frutiland, Estado norteamericano de Washington.
Según Associated Press, la niña trató de defenderse del ataque, mientras que los otros dos niños huyeron del lugar y pidieron ayuda.
La menor fue encontrada por adultos, cubierta de sangre, y luego fue transportado al hospital, donde se está recuperando.
La agencia de noticias también indica que el animal, un macho joven, fue sacrificado en el lugar.
Staci Lehman, vocera del Servicio de Pesca y Vida Silvestre, dijo que los ataques de pumas son raros y explicó que "la niña no hizo nada malo". En Washington, en los últimos 100 años se registraron dos muertes relacionadas con ataques de este animal.
El responsable aconseja a las personas en esta situación que le griten al animal y traten de presentar una posición de superioridad.
Si el puma ataca, "defiéndete lo más que puedas y trata de ponerte de pie", "no le dé la espalda", "no le quites la vista de encima al animal" y "no corras", aconsejó.
