Ciudad de México - Sinaloa vive horas de violencia tras la detención, esta madrugada, de Ovidio Guzmán López, hijo del conocido traficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, según las autoridades mexicanas.
En las últimas horas, proliferan actos de violencia y bloqueos de carreteras en diferentes puntos de la ciudad de Culiacán, en Sinaloa, pero también numerosos enfrentamientos entre miembros armados del cártel y miembros del Ejército mexicano.
Así, instituciones culturales públicas y privadas de todo el estado anunciaron la suspensión de sus actividades hasta nuevo aviso.
Las clases fueron suspendidas y también el gobierno de Sinaloa y la Cámara Municipal de Culiacán anunciaron la suspensión del trabajo en el sector público y recomendaron que la población “quedara en casa”.
La detención ocurrió en la madrugada de hoy, en una operación en la que estuvieron involucrados miembros del Ejército Nacional, de la Guardia Nacional y otras instituciones de seguridad y que fue el resultado de seis meses de trabajo.
Ovidio es el líder de la facción “Los Menores”, vinculada al cártel del Pacífico, generador de violencia en cuatro estados y en la región noroeste del país.
Este escenario es muy parecido con lo que se vivió en 2019, cuando Ovidio Guzmán fue detenido por primera vez.
A la fecha, las autoridades se vieron obligadas a liberar Ovidio al fin de 24 horas para contener la escalada de violencia.
Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, junto con su hermano Joaquín Guzmán López, están acusado en los Estados Unidos por asociación criminosa relacionada con drogas ilícitas.
Según con las autoridades norteamericanas, los hermanos conspiraron para distribuir cocaína, metanfetamina y cannabis en los Estados Unidos desde México y otras partes del mundo entre 2008 a 2018.
Ya que Joaquín “El Chapo” Guzmán fue condenado a prisión perpetua en los Estados Unidos.
