París - El juicio por homicidio involuntario contra la aerolínea Air France y el fabricante de aviones Airbus en el caso del vuelo Río-París, en el que murieron 228 personas en 2009, comienza hoy en la corte francesa.
Se espera que el juicio por el accidente del vuelo AF447, que se estrelló en el Océano Atlántico el 1 de junio de 2009, dure hasta el 8 de diciembre.
Tras una "batalla judicial" y una "instrucción caótica", la presidenta de la asociación de familiares de las víctimas del accidente, Danièle Lamy, dijo a la agencia de noticias France Presse que esperaba que "este juicio sea el juicio de Airbus y Air France" y no "de los pilotos".
En agosto de 2019, los dos jueces de instrucción encargados de la investigación señalaron "errores de conducción" como el origen del accidente.
Según expertos, el congelamiento de las sondas de velocidad implicó una desregulación de las mediciones de velocidad del Airbus A330 y desorientó a los pilotos que no impidieron la caída de la aeronave.
Los familiares de las víctimas y los sindicatos de pilotos apelaron, en 2021, el fiscal general francés solicitó una demanda por "homicidio involuntario" contra Air France y Airbus.
Danièle Lamy dijo que esperaba "un juicio imparcial y ejemplar", para que un accidente similar "no vuelva a ocurrir" y para que Air France y Airbus "pongan la seguridad aérea en el centro de sus preocupaciones y no solo la rentabilidad".
En un comunicado de prensa, Air France recuerda "la memoria de las víctimas de este terrible accidente" y expresa su "más profunda solidaridad con todos sus seres queridos".
Todos los pasajeros y tripulantes del AF447, de 34 nacionalidades, fallecieron en el accidente, el más mortífero en la historia de la compañía francesa.
Air France se comprometió a "seguir demostrando que no incurrió en ninguna culpabilidad penal en el origen del accidente".
Airbus, que se niega a comentar sobre la sentencia, también cuestiona cualquier irregularidad.