Brasilia - El gobierno brasileño está convencido de que la normalización de las relaciones con Venezuela le permitirá retomar el comercio bilateral, que ha caído a mínimos históricos en los últimos cuatro años, dijeron este miércoles fuentes oficiales.
“Hay un sentir común” respecto al horizonte abierto por la reanudación de las relaciones diplomáticas, suspendidas desde 2019 por decisión del entonces presidente brasileño Jair Bolsonaro, dijo el embajador Flávio Macieira, designado encargado de negocios en Venezuela por el nuevo gobierno brasileño, en una rueda de prensa
El decreto firmado por Bolsonaro fue revocado el 1 de enero, cuando asumió Luiz Inácio Lula da Silva y ordenó la normalización inmediata de todas las relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro.
Lula da Silva también decidió reabrir la embajada en Caracas, cerrada por decisión de Bolsonaro, cuyo gobierno reconoció al líder opositor Juan Guaidó como "presidente legítimo" de Venezuela.
Según Macieira, quien regresó esta semana de la capital venezolana, la embajada, la sede del consulado general en Caracas y la residencia del embajador se encuentran en perfecto estado y se espera que vuelvan a funcionar a pleno rendimiento en el menor tiempo posible.
"La atención a la comunidad brasileña (estimada en 20.000 personas) será la prioridad" en la primera fase, explicó Macieira.
El diplomático dijo que encontró en el gobierno venezolano "enormes expectativas" en cuanto a la reanudación de las relaciones con Brasil, que se dará en todos los ámbitos, desde el político y económico hasta el cultural, ya que "es natural" entre dos países que comparten frontera de unos 2.000 kilómetros, dijo.
“También se retomará el diálogo con toda la sociedad venezolana”, que incluye al empresariado, que tuvo una relación muy intensa con Brasil hasta 2016 y que fue deteriorándose paulatinamente hasta caer a mínimos históricos.
Según datos oficiales, el comercio bilateral movilizó alrededor de 5 mil millones de dólares norteamericanos anuales hasta 2015, pero debido a la propia crisis venezolana y la suspensión de la relación, se redujo a unos USD 800 millones en 2021.