Luanda - Angola celebra este domingo, 8 de enero, el Día de la Cultura, fecha de enorme relevancia política y social para la identidad nacional, caracterizada por sus diferentes manifestaciones artísticas y culturales, su diversidad y el sentido de endogeneidad.
Este año, las jornadas culturales comenzaron el 5 de enero y deben prolongarse hasta el 9 del mismo mes, en referencia al Centenario de António Agostinho Neto, primer Presidente de la República, conmemorado el 17 de septiembre.
El evento fue instituido en 1986, en honor al discurso del Presidente António Agostinho Neto, en ocasión de la toma de posesión de los miembros de la Unión de Escritores Angoleños (UEA), en 1979.
El Ministerio de Cultura y Turismo organiza el acto central, el 9 de enero, con temas musicales, un recital de poesía y la tradicional entrega de Diplomas al Mérito a los agentes culturales, que han contribuido significativamente al desarrollo de la Cultura Nacional.
En la apertura de las jornadas, el ministro Filipe Zau, tras depositar una ofrenda floral sobre el sarcófago de Agostinho Neto, destacó la importancia de las celebraciones del Día de la Cultura Nacional, ya que se realizan con espíritu de unidad nacional y para reflejar los ideales y aspiraciones del fundador de la Nación.
Refirió que las celebraciones girarán en torno al discurso pronunciado por el "Fundador de la Nación", en 1979, en la Unión de Escritores Angoleños (UEA), sobre la cultura nacional, donde fue exaltado el "espíritu de unidad nacional".
Explicó que una de sus preocupaciones siempre ha sido la necesidad de crear un clima de armonía en términos de unidad nacional, para la consolidación de la independencia.
También según el funcionario, Angola como país pluricultural y lingüístico debe permanecer unido, ya que las identidades culturales son diversas, pero el mayor sentido de nacionalidad reside en la ideología que une a los pueblos angoleños.
Para Filipe Zau, la "angolanidad" debe ser el lema a seguir en la construcción de una Angola cada vez más inclusiva, independientemente de las diferencias sociales y culturales.
Bajo el lema "Identidad, Diversidad y Cultura de la Angoleña", nunca es tarde para recordar el fragmento del discurso de Neto de 1979, “la cultura no puede inscribirse en el chovinismo, ni pretende sustraerse al dinamismo de la vida, a las condiciones materiales y, cada etapa, corresponde a una forma de expresión y realización de los actos materiales”.
