Luanda - La reducción del 56,6 por ciento del Impuesto Industrial, prevista en el Presupuesto General del Estado (PGE-22), para los prestadores de servicios de los sectores petroleros y minero, incentiva el desarrollo tecnológico y organizativo de las industrias nacionales, afirma la economista Juliana Evangelista.
El PGE para 2022 reduce la tasa del Impuesto Industrial, que grava los servicios accidentales, del 15% al 6,5%, y el proyecto de ley del Ejecutivo angoleño, enviado a la Asamblea Nacional, fue aprobado este lunes, 06, en particular por los diputados.
En declaraciones a la Angop, Juliana Evangelista cree que la reducción del Impuesto Industrial para los trabajadores de las industrias petrolífera y minera, prevista en el Presupuesto General del Estado para el año 2022, forma parte de una de las medidas para incentivar la actividad económica en estos sectores motores de la economía angoleña.
Juliana Evangelista recuerda que, en el pasado, la tasa vigente era de 6,5% y se incrementó a 15% en 2017.
Según la especialista, las altas tasas a las empresas afectadas encarecen el costo de la producción petrolera, hecho que se configura como un factor inhibidor para la atracción de inversión extranjera.
Consultada sobre en qué medida esta medida de reducción del 15 al 6,5% satisface al sector industrial petrolero y minero, Juliana Evangelista considera que es un paso importante para incrementar el flujo de inversiones, mejorar el ambiente de negocios en el país, así como la solidez y liquidez financiera para las empresas.
Juliana Evangelista destaca que el cambio en la matriz energética forma parte de los temas de la agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2030, que prevé la introducción de energías limpias.
Por ello, indica que es prioritario explotar al máximo los recursos minerales (Petróleo), de lo contrario serán subutilizados.
Según la especialista, la mayor franja de empresas de este segmento son las pequeñas y medianas empresas, las cuales son responsables, en gran parte, de la generación de riqueza y empleos en las economías.
En ese sentido, enfatiza, es necesario garantizar la promoción y el crecimiento de estas empresas, eliminando las barreras a su desarrollo, en cuanto a la reducción significativa de impuestos y/o tasas de manera que se estimule la competitividad y la creación de más empleos.
Para la economista, las consecuencias inmediatas de esta medida gubernamental pasan por la mayor capacidad de atracción de inversión extranjera a las empresas del sector, lo que generará una mayor competitividad de las empresas.
“Los impuestos deben ser fáciles de entender y simplificar los procesos de pago, ya que la tributación genera burocracia, lo que implica obligaciones de asesoramiento para las empresas, ya sea en la determinación de lo que se gana y se produce”, resaltó.
El sector petrolero, subraya, sigue siendo la palanca de la economía nacional y representa alrededor del 90% de las exportaciones y alrededor del 75% de los ingresos tributarios, por lo que la reducción del impuesto industrial es de gran importancia.
Para el presidente de la Asociación Industrial de Angola (AIA), José Severino, la reducción del impuesto industrial es oportuna, en un período en que Angola ha ampliado “tímidamente” su parque industrial.