Mbanza Kongo – Doscientos y 40 camiones cargados con mercancías diversas con destino a la provincia de Cabinda y Kinshasa están retenidos, hace más de dos semanas, en la frontera entre Angola y la República Democrática del Congo (RDC).
La medida unilateral adoptada por las autoridades fronterizas en la región del Congo Central (RDC) está creando limitaciones para los camioneros, que transportan productos perecederos, además de otras mercancías.
Para intentar superar el impasse, una delegación de la Asociación de Transportistas de Mercancías por Carretera de Angola (ATROMA), encabezada por su presidente ejecutivo, António Gavião Neto, viajó este jueves a la comuna fronteriza de Luvo, municipio de Mbanza Kongo.
En declaraciones a la prensa, el responsable lamentó la medida unilateral adoptada por las autoridades congoleñas, para quienes este comportamiento socava las buenas relaciones de amistad existentes entre los dos países vecinos.
“Lamentamos la posición adoptada por las autoridades de este país, que tiene una relación centenaria de amistad y hermandad con Angola”, lamentó, subrayando que resolver este problema trasciende la capacidad de ATROMA.
Informó que la delegación de ATROMA viajará, este viernes, al municipio fronterizo de Nóqui, donde también se vive el mismo escenario.
Durante su estancia en la comuna fronteriza de Luvo, los miembros de ATROMA intentaron, sin éxito, establecer contacto con las autoridades aduaneras de la República Democrática del Congo.
Debido a la discontinuidad geográfica, camiones con destino a la provincia de Cabinda, en el norte de Angola, transitan por el territorio de ese país vecino, transportando diversas mercancías.
ATROMA controla 52 empresas de transporte de carga, que suman cinco mil camiones en todo el país. DA/JL/EP