Luanda – Cien mil dólares norteamericanos (83 millones de kwanzas) fueron dispuestos por el Sistema Coca-Cola Angola para financiar el proyecto ‘OMAZA’, que persigue mejorar el acceso al agua y a la seguridad sanitaria en el mercado de Calumbo, en Viana, y en las comunidades de Mazozo y Cabala, en el municipio de Icolo e Bengo, en Luanda.
Con este proyecto, que se desarrollará en un período de 12 meses, a partir de diciembre de 2023, se espera fortalecer la resiliencia de las comunidades vulnerables al clima, con más de 26 millones de litros de agua al año, y mejorar la capacidad de gestionar los recursos hídricos.
Según una nota de prensa enviada este martes a la Angop, también se estima que OMAZA beneficiará directamente a más de 1.500 familias, de las cuales el 60 por ciento son mujeres jóvenes o adolescentes, proporcionando un impacto histórico.
La iniciativa del Sistema Coca-Cola en Angola y Refriango, en colaboración con la Associación Instituto Piaget de Angola (AIPA), también tiene como objetivo reponer continuamente agua a las comunidades y devolver al medio ambiente el agua utilizada en la producción de bebidas, a través del tratamiento de las aguas residuales, cumpliendo con la normas locales, contribuyendo a la sostenibilidad de la vida acuática.
Con OMAZA, las comunidades seleccionadas serán testigos de importantes beneficios, incluido el acceso a tres bombas de agua portátiles, además de contar con un equipo técnico para instruir a los miembros de la comunidad a utilizar el método de desinfección del agua conocido como 'SODIS', que aprovecha la luz solar para hacer que el agua sea potable.
Esta iniciativa también facilitará el acceso a agua más segura y aumentará el conocimiento sobre la atención médica, mejorando sus vidas y el medio ambiente local.
Según la nota, el proyecto ilustra el compromiso de Coca-Cola con su Estrategia de Seguridad Hídrica 2030, demostrando un enfoque basado en el contexto para aumentar la seguridad hídrica a través de la reposición del agua, con políticas inteligentes y garantizando el uso responsable del preciado líquido.
Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas, en 2020, entre 75 y 250 millones de personas en el continente africano enfrentaron escasez de agua, debido a la falta de infraestructura de suministro de agua potable, el rápido crecimiento demográfico y períodos prolongados de sequía, factores que causan un estrés hídrico muy grave, especialmente en el África subsahariana.