Talatona – Angola asumió, este jueves, la presidencia rotatoria de la Juventud y los Deportes de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) por un período de cinco años, durante la XIV Conferencia de Ministros, celebrada en la capital, Luanda.
La decisión es resultado de un documento final de la reunión de los responsables de ese sector y, en esa ocasión, hubo un intercambio de carteras entre Santo Tomé y Príncipe (saliente) y Angola.
Durante el “cónclave” de dos días, los ministros reiteraron su compromiso de continuar con el programa de cooperación comunitaria en las áreas de Juventud y Deportes, con actividades encaminadas a contribuir a la afirmación de la CPLP en el espacio nacional e internacional.
Reconocieron que una estrategia política conjunta en el ámbito de la juventud es crucial para promover el desarrollo sostenible de los Estados miembros, en las esferas social, económica y ambiental.
Los oradores recordaron que los jóvenes son la garantía del futuro de la comunidad y que el cambio climático y la protección del medio ambiente se encuentran entre las principales preocupaciones de la masa juvenil.
Destacaron el hecho de que cada joven de la comunidad puede contribuir activamente a los esfuerzos de adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático, dentro del alcance de los principios de la CMNUCC y la implementación de los objetivos de su acuerdo de París.
Según el comunicado final, los participantes reafirmaron el compromiso de la CPLP con los objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.
La Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) fue creada el 17 de julio de 1996, en Lisboa, y está integrada por Angola, Brasil, Cabo Verde, Guinea Bissau, Guinea Ecuatorial, Portugal, Mozambique, Santo Tomé y Príncipe y Timor Este.
Su objetivo es la consulta y cooperación político-diplomática en todas sus formas, la promoción y defensa de la lengua portuguesa a través de un intenso diálogo cultural.
La Organización se rige por los principios de igualdad soberana de los Estados Miembros, no injerencia en los asuntos internos, respeto a su identidad, reciprocidad de trato y primacía de la paz, la democracia y el Estado de derecho.
También defiende los derechos humanos y la justicia social, el respeto a su integridad territorial, la promoción del desarrollo y la promoción de una cooperación mutuamente ventajosa.
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