Quiçama - La ministra del Medio Ambiente, Ana Paula de Carvalho, entregó el miércoles dos camionetas a la administración del Parque Nacional Quissama, para aumentar la capacidad de inspección local.
La gobernante reconoció que los 108 inspectores del Parque enfrentaron numerosas dificultades para controlar un área de 9.960 kilómetros cuadrados.
Según la ministra, es preocupación y prioridad del gobierno velar por la seguridad de la flora y la fauna en los parques, para combatir la caza furtiva, las invasiones y los incendios.
“Queremos reactivar el parque con la repoblación de animales, queremos que los pocos animales que tenemos aquí se reproduzcan, que no haya caza ni quemas para aumentar esta población”, pronosticó.
Por eso, agregó, hay que dejar que se reproduzcan y en algunos casos el gobierno tendrá que reforzar, haciendo reposición de animales.
Por otro lado, adelantó que este es el primer paso de varios que se tomarán para conservar mejor el parque.
Ana Paula de Carvalho dijo que el plan incluye todos los parques, destacándose los de Mavinga y Luengué-Luiana, en Cuando Cubango, que ya fueron beneficiados con recursos.
Según Ana Paula de Carvalho, el gobierno quiere convertir los parques en puntos de atracción turística, por eso orientó la apertura de las infraestructuras existentes para atender a los turistas.
“Esperamos que dentro de 15 días se creen las condiciones de alojamiento y alimentación para los turistas, sean nacionales o extranjeros”, aconsejó.
Tras ofrecer los vehículos, la ministra recorrió el parque, en una visita guiada, en compañía de miembros de su departamento y periodistas, habiendo visto dos jirafas, las únicas, por cierto, varias manadas de ñus, bambis y monos.
Según António Silva, administrador del parque, el sitio está luchando contra invasiones, caza furtiva, falta de instalaciones de inspección e incendios. Informó que a causa de la cacería, casi todos los animales están en peligro de extinción, con mayor énfasis en la jirafa, que actualmente tiene solo dos machos.
Pidió más recursos materiales, técnicos, tecnológicos y humanos, sin precisar el número, para una fiscalización más eficaz.
El parque cuenta con varias especies, entre ellas elefantes, cebras, ñus, gacelas y bambi, que conviven con una población estimada de 20 mil habitantes distribuidos en varias comunidades.