Luanda – Angola y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO) analizaron, este miércoles, en Roma (Italia), la Estrategia de Angola para la resiliencia de los Sistemas Alimentarios.
Durante un encuentro entre la delegación angoleña y el director general del organismo, Qu Dongyu, al margen de la 43ª plenaria de la FAO, también se analizaron las principales preocupaciones de Angola en el nivel de los programas en marcha para la agricultura y la pesca y el impacto de los cambios climáticos.
También estuvo en análisis la admisión de cuadros angoleños en la FAO.
La ministra de Pescas, Carmen do Sacramento Neto dos Santos, aprovechó la ocasión para solicitar el apoyo de la FAO para la formación del personal en diversos sectores, en particular el de pesca, en virtud del programa de acuicultura continental.
La producción acuícola en Angola, en particular el cultivo de la tilapia (cacusso), según la ministra Carmen do Sacramento Neto dos Santos ha crecido en varias regiones del país, resultado del trabajo de mapeo de las zonas potenciales para la producción acuícola, celebrado en el ámbito de la cooperación entre el Gobierno de Angola y la FAO.
Por su parte, el secretario de Estado de Agricultura y Ganadería, João Cunha, adelantó que el gobierno de Angola pretende ampliar el apoyo que concede la agricultura familiar, responsable por 90 por ciento de la producción agrícola nacional, particularmente al proyecto escuelas al campo, para mejorar su capacidad de producción y resiliencia.
Joao Cunha añadió que el suporte técnico de la FAO es bienvenido para ayudar a Angola a incrementar la producción agrícola, que sólo el año anterior creció 5,6 por ciento, en búsqueda de la autosuficiencia alimentaria, una de las grandes apuestas del gobierno, para reducir el hambre y la pobreza.
Ya el director general de la FAO, Qu Dongyu, manifestó la disponibilidad de la agencia de seguir apoyando los proyectos viables, recomendando a Angola al refuerzo del control de calidad de los principales productos agrícolas y pesqueros.
La sesión de este miércoles siguió con un análisis del estado de la alimentación y la agricultura en el mundo.
Los participantes debatieron también, en una mesa redonda, la importancia de las infraestructuras hídricas para el desarrollo, con vistas a cumplir los objetivos del desarrollo sostenible.
La Organización para la Alimentación y Agricultura es una agencia especializada de las Naciones Unidas que dirige los esfuerzos internacionales para erradicar el hambre en el mundo.
Tiene como objetivo alcanzar la seguridad alimentaria para todos y garantizar que las personas tengan acceso regular a alimentos de buena calidad suficientes para tener una vida activa y saludable.
Con 194 Estados Miembros, la FAO trabaja en más de 130 países de todo el mundo.