Kigali - El presidente de Ruanda, Paul Kagame, acusó el lunes al ejército de la vecina República Democrática del Congo (RDC) de colaborar con un grupo rebelde creado por algunos de los líderes del genocidio de 1994, en medio de tensiones diplomáticas bilaterales.
Las acusaciones de Kagame se produjeron en una entrevista con la televisión estatal de Ruanda, después de que el gobierno de Kinshasa acusara repetidamente a Kigali de cooperar con el grupo rebelde M23, que ha librado intensas batallas desde marzo contra el ejército de la RDC.
“La RDC está apoyando a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), lamentablemente con el conocimiento de MONUSCO (misión de paz de las Naciones Unidas en la RDC)”, dijo el presidente ruandés.
Kagame añadió que el Gobierno de Kinshasa se comporta como un "niño mimado" que, tras "causar líos", decide "llorar" para llamar la atención de la comunidad internacional.
"Los incidentes comenzaron en 2019, cuando las FDLR atacaron el sector de Kiningi (noroeste de Ruanda) y mataron a nuestra gente (...). Esta personas estaban armadas por el gobierno de la RDC. También huvo bombardeos dentro de nuestro territorio con armas pesadas que mataron personas ", dijo también el presidente ruandés.
“La RDC tiene problemas con los que no puede lidiar, al igual que todos los países soberanos. Sin embargo, es inaceptable ver grupos armados en la RDC atacarnos y matar a nuestra gente”, subrayó.
Durante la entrevista, Kagame volvió a negar los supuestos vínculos del ejército ruandés con el M23.
Desde marzo, los rebeldes del M23 han estado liderando una fuerte ofensiva contra las posiciones del ejército de la RDC en la provincia de Kivu del Norte (noreste), controlando con éxito la ciudad estratégica de Bunagana, un importante centro para el comercio y el tráfico de camiones en la frontera de la RDC y Uganda, y en otros lugares.
Además de provocar el desplazamiento de más de 170 mil personas, según datos de la ONU, los combates también generaron una escalada de tensión diplomática entre ambos países.
Según el portavoz de Monusco, Frederic Harvey, actualmente no hay una "confirmación fáctica" de la colaboración de Ruanda con el M23.
El M23 se fundó a principios de 2012 como una facción del ahora desaparecido Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), un grupo rebelde principalmente con base en Ruanda que luchó contra las FDLR en suelo de la República Democrática del Congo.
Las FDLR, a su vez, fueron formadas en 2000 por algunos líderes del genocidio de Ruanda de 1994 y otros ruandeses exiliados en la vecina República Democrática del Congo con el objetivo de recuperar el poder político en su país de origen.