Maputo - Grupos armados desconocidos mataron a 11 personas durante ataques contra cinco aldeas remotas desde el viernes en Cabo Delgado, en el norte de Mozambique, dijeron hoy fuentes locales a Lusa.
Al mismo tiempo, las fuerzas militares anunciaron que habían abatido a siete rebeldes en otro punto de Palma.
En ambos casos, las ocurrencias se ubican en el extremo norte de la provincia, cerca de la frontera con Tanzania.
Los ataques a las cinco aldeas son atribuidos por la población a grupos insurgentes que atormentan a Cabo Delgado desde 2017.
En este caso, las incursiones se dirigieron contra las aldeas de Chikwaia Velha, Chikwaia Kankhomba, Janguane, Muia, Mungano en el distrito de Nangade donde se saquearon varios bienes y se destruyeron casas.
La cifra de muertos podría estar por encima de los 11, según las mismas fuentes. Los ataques también destruyeron un campamento de pesca junto a un río.
Tras estos ataques, desde el viernes se ha producido una nueva huida de la población hacia la aldea de Nangade, sede del distrito, en busca de seguridad.
“Aquí en el pueblo todo está lleno de gente, mientras otros se están mudando a Mueda o Pemba”, añade una de las fuentes.
El distrito de Nangade se encuentra entre dos partes diferenciadas de Cabo Delgado: limita al este con Palma y Mocímboa da Praia, escenario de los principales enfrentamientos, y al oeste con Mueda, que ha servido de refugio a miles de desplazados.
A medida que avanza la ofensiva apoyada por Ruanda y la Comunidad de Desarrollo de África Meridional (SADC), se sospecha que los rebeldes también están huyendo a distritos y provincias vecinas, dando lugar a ataques puntuales contra aldeas.
El lunes, un portal de información que sigue a las fuerzas de defensa mozambiqueñas informó de la muerte de siete insurgentes en el distrito de Palma, en una operación en la que se descubrieron 16 escondites en el monte y una base de comunicaciones de los rebeldes.
Tras las mismas operaciones, se anunció el control del puesto administrativo de Pudanhar, ubicado a medio camino entre Palma y Nangade.
La provincia de Cabo Delgado es rica en gas natural, pero ha sido aterrorizada desde 2017 por rebeldes armados, con algunos ataques reivindicados por el grupo extremista Estado Islámico.
El conflicto ha causado ya más de 3.100 muertos, según el proyecto de registro de conflictos de la ACLED, y más de 859.000 desplazados, según las autoridades mozambiqueñas.
