Praia - El Fondo Monetario Internacional (FMI) mantiene su previsión de crecimiento del PIB para Cabo Verde en el 4,4 por ciento en 2023 y hoy se anunció una inflación del 5,2 por ciento, con caída de los precios de los combustibles y de los productos alimenticios.
Los pronósticos fueron hechos a la prensa, en la ciudad de Praia, por Justin Tyson, jefe de una misión del FMI que la semana pasada estuvo en Cabo Verde para discutir con las autoridades nacionales la implementación de la agenda de reformas económicas del país, en el marco del Programa de Crédito Ampliado (ECF), apoyado por el Fondo y firmado el 15 de junio de 2022.
En el comunicado final de la misión, esa institución financiera internacional constató que el desempeño de Cabo Verde bajo el programa "es robusto" y que el año pasado registró "una fuerte recuperación", sostenida por la recuperación del turismo.
“La economía se recuperó con fuerza en 2022, registrando un crecimiento de 17,7 por ciento, el déficit primario cayó a 1,9 por ciento del PBI, la deuda con relación al PBI disminuyó, la cuenta corriente mejoró y las reservas internacionales se mantuvieron bajas, si bien en niveles adecuados a la protección de la indexación al euro", afirmó.
Según la misma fuente, en 2022 las autoridades caboverdianas utilizaron la política monetaria y presupuestaria para apoyar la recuperación y mitigar los efectos de la crisis en los más vulnerables.
Para este año, el FMI mantiene las previsiones de "moderación" del crecimiento real del Producto Interno Bruto (PIB) en 4,4 por ciento, a medida que se normalice el crecimiento de las exportaciones.
“Se espera que la inflación sea del 5,2 por ciento en 2023 con la caída de los precios de los combustibles y los alimentos. De igual forma, el déficit de cuenta corriente debe aumentar en 2023, a medida que las exportaciones de bienes y servicios, el turismo, las remesas y la inversión extranjera directa se desaceleren en comparación con los niveles grabado en 2022”, relató.