Dakar - La extracción artesanal de oro por parte de las comunidades mineras de Senegal empobrece a estas comunidades y es necesaria una "acción coordinada" para responder a las "consecuencias ambientales y de salud" de esta actividad, advierte el Instituto de Estudios de Seguridad (ISS).
La minería de oro artesanal a pequeña escala "es vital" para la economía de la región de Kédougou, donde se encuentra el 98% de los sitios de extracción de oro de Senegal, pero esta práctica "ha contribuido a la deforestación, la degradación del suelo y el agua, el aire y el suelo debido a los productos químicos". utilizados para procesar oro", subraya el informe "La búsqueda de oro empobrece a las comunidades mineras artesanales de Senegal", publicado hoy por el instituto de análisis sudafricano. En 2018, las minas de la región de Kédougou produjeron alrededor de 4,2 toneladas de oro, con un valor de 86.600 millones de francos cfa (132,25 millones de euros) y emplearon a casi 32.500 personas. "Los ingresos generados por este tipo de mina de oro permiten a la población local pagar la atención médica, la alimentación y la educación", escribe Paulin Maurice Toupane, ISS para África Occidental, Sahel y la cuenca del lago Chad. Sin embargo, "se necesita una acción coordinada para enfrentar de manera efectiva las consecuencias ambientales y de salud de la minería aurífera", particularmente debido al uso intensivo de mercurio y cianuro en la minería artesanal del metal precioso, advierte el investigador. La minería artesanal y de pequeña escala es uno de los sectores con mayores emisiones de mercurio en Senegal. Anualmente se utilizan unas 5,2 toneladas de mercurio: 3,9 toneladas en Kédougou y 1,3 toneladas en la región de Tambacounda, según el informe. El uso de mercurio en el proceso de extracción de oro ha contaminado suelos, sedimentos y ríos. El agua y los ecosistemas asociados del río Falémé, el principal afluente del río Senegal, que forma una frontera natural entre Senegal y Malí, "se están deteriorando", advierte la ISS.