Addis Abeba - China prometió hoy, 20, reforzar el apoyo de Beijing al Cuerno de África, afectado por desafíos como la pandemia, la guerra y la sequía, dijo el enviado especial de China en una reunión en Addis Abeba.
"China está haciendo mucho para apoyar el Cuerno de África, donde existen desafíos provocados por la pandemia del Coronavirus, la sequía, la guerra y las migraciones", dijo el responsable chino para el Cuerno de África, Xue Bing, en el discurso de apertura de la primera Conferencia de Paz de China y del Cuerno de África, que comenzó hoy en la capital de Etiopía con la presencia de altos representantes de seis países de la región Djibuti, Kenia, Somalia, Sudán del Sur, Sudán y Uganda.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Etiopía anunció, en un breve comunicado, que la conferencia se centrará en temas como la paz y la seguridad, el desarrollo y el buen gobierno en los países del Cuerno de África.
El asesor de seguridad nacional del primer ministro etíope, Redwan Hussein, agradeció el apoyo de Pekín para garantizar la paz y la seguridad en la región, sacudida por el conflicto armado, los ataques de extremistas islámicos y la peor sequía en 40 años.
Bing dijo que China continuará fortaleciendo su apoyo a los países en esta área y cooperará en sectores como la seguridad alimenticia, el desarrollo tecnológico, la infraestructura y la lucha contra el terrorismo.
La región del Cuerno de África es escenario de varios conflictos, entre ellos la guerra entre el gobierno central etíope y los rebeldes del Frente Popular para la Liberación de Tigray (FPLT), que en más de dos años dejó alrededor de 9,4 millones de personas necesitadas de asistencia humanitaria.
En Sudán del Sur, que lleva nueve años librando una guerra a pesar de los acuerdos de paz de 2018, los servicios sociales más básicos, como la sanidad o la educación, dependen en gran medida de organizaciones no gubernamentales.
El grupo 'yihadista' Al Shabab, afiliado al grupo extremista Al Qaeda desde 2012, lleva a cabo frecuentes ataques en la capital somalí, Mogadiscio, y en otros puntos del país para derrocar al Gobierno central y establecer por la fuerza un Estado islámico ultraconservador.
Estos extremistas también llevaron a cabo ataques en otros países de la región, como Kenia y Uganda.
Al problema de la inseguridad se sumó una intensa sequía, que está dejando a millones de personas en una situación extrema.
Según un informe publicado en mayo por las organizaciones no gubernamentales Save The Children y Oxfam, más de 23 millones de personas ya se enfrentan al "hambre extrema" en Etiopía, Somalia y Kenia.
China mostró interés creciente en África, convirtiéndose en el primer socio comercial del continente.